PALABRASDEL SANTO PADRE JUAN XXIII
A LA HORA DEL ÁNGELUS*

Domingo 30 de julio de 1961

Carísimos hijos, una confidencia. Esta mañana, en hora muy temprana, el ángel de la muerte ha entrado en el Palacio Apostólico y se ha llevado consigo al cardenal secretario de Estado, Domenico Tardini, que era el colaborador más cercano y más importante del Papa en el gobierno de la Santa Iglesia.

Podéis imaginaros lo afligido que estará nuestro corazón; y aunque confiamos en la misericordia del Señor, que habrá ya acogido en su paz a este alma bendita, sentimos, sin embargo, la necesidad y el deber de comunicaros esta causa de tristeza y de invitaros a unir vuestras oraciones a las nuestras: una oración que afecta ciertamente los intereses del mundo entero.

El cardenal secretario de Estado es el primer colaborador del Papa en el gobierno de la Iglesia universal. Oremos por él. Desde el cielo, donde la bondad del Señor le ha asociado, así lo esperamos, a los ángeles y a los santos, él rezará por nosotros y por su Iglesia.

A continuación el Papa entonó el De profundis y concluyó diciendo:

El miércoles próximo tendrán lugar los funerales solemnes en la Basílica de San Pedro, ya que el difunto y venerado cardenal secretario de Estado era arcipreste de dicha Basílica.