RADIOMENSAJE DEL SANTO PADRE PABLO VI
CON MOTIVO DE LA COLECTA ANUAL ORGANIZADA POR EL EPISCOPADO ESTADOUNIDENSE
EN FAVOR DE LOS NECESITADOS DEL MUNDO ENTERO

Domingo 8 de marzo de 1964

Queridos hijos e hijas:

Es un motivo de especial alegría para Nos esta oportunidad de dirigirnos al pueblo de los Estados Unidos de América, nación que está muy dentro de nuestro corazón. Y el gozo es más sentido, pues os hablamos en estos momentos en que nuestros venerables hermanos los obispos americanos lanzan su llamamiento anual en favor de los necesitados de otras tierras. Vuestra nación ha sido muy sensible a los sufrimientos y a las necesidades de los pobres y desplazados de todas las razas y credos. Desde hace muchos años, guiados por el criterio de amor fraternal, los obispos católicos han reunido aportaciones para este Fondo de Ayuda, y a través de su excelente organización, los Servicios de Ayuda Católica de la Conferencia Nacional Católica de Beneficencia, han dispensado amplia asistencia con un programa de ayuda universal.

Somos plenamente conscientes de lo que el pueblo americano ha hecho a través de su Gobierno y a través de numerosas agencias de beneficencia para aliviar el sufrimiento de muchos millones de personas en las zonas menos afortunadas del mundo. La generosidad del pueblo americano de todos los credos, ha ganado la gratitud, la admiración y el afecto de todo el mundo.

Ofrecemos nuestras fervientes oraciones al Todopoderoso para que continúe bendiciendo con abundancia al pueblo de Estados Unidos de América, que ha sido tan constante en estos trabajos de caridad y amor. Y extendemos a todos nuestra bendición y nuestros fervientes buenos deseos.